Indispensable
article | Tiempo de lectura5 min
Indispensable
article | Tiempo de lectura5 min
Ornamentos litúrgicos, bordados en oro y tapices... Observe el minucioso trabajo de los pintores, cartonniers y lissiers.
En el siglo XVIII, en pleno apogeo de la industria lionesa de la seda, algunas fábricas se especializaron en los paños de oro. Gracias a las bordadoras que trabajaban a domicilio, las casullas y cofias se transformaron en cuadros bordados.
© Centre des monuments nationaux / Clément Apffel
Los tapices son verdaderos cuadros de lana y seda que rivalizan en detalle con sus homólogos pintados. Los tesoros de tapices de Flandes narran las hazañas de héroes mitológicos griegos, como Ulises, o de grandes figuras bíblicas, como Jacob.
Los verdes animados de Aubusson, por su parte, destacan por la sobriedad de su paleta marrón verdosa o azul verdosa, perfecta para representar paisajes bucólicos y una fauna más o menos atípica que va de los pájaros a los unicornios.
© Centre des monuments nationaux / Clément Apffel